Diversidad lingüística y cultural: la comunidad sorda mexicana
Sinopsis
El pasado 20 de enero de 2016 se realizó a través de la RNIE mexicana, la primera conferencia de los Seminarios virtuales de discapacidad auditiva (SEVIDA)...

Por Jorge Santiago

La Dra. Miroslava Cruz-Aldrete, abordó el tema de La diversidad lingüística y cultural: la comunidad sorda mexicana.

Con una amplia experiencia en el tema, ha realizado estudios en la gramática de la Lengua de Señas Mexicana. El propósito de su conferencia es cambiar la visión médica-rehabilitatoria que persiste hacia la comunidad sorda, ya que las personas se centran en estudiar a la persona sorda por la forma en que perdieron la audición o las limitaciones de su discapacidad, pero olvidan que hay algo más allá de la capacidad de oír que es la capacidad de comunicación. Por lo tanto, ella propone el estudio de la comunidad sorda a través de diversas áreas de conocimiento: socioantropológica, lingüística y neurociencias.

La ponente indicó que el lenguaje es lo que nos diferencia de los animales, ya que es la capacidad del ser humano para poder comunicarse por medio de signos, como morfemas, que se manifestan a través de una lengua oral o visogestual.

El ser humano utiliza distintos recursos de comunicación para tener interacción con el otro, entre ellos está el uso de señas y gestos en distintos contextos, por ejemplo en la danza, en congregaciones religiosas al realizar votos de silencio o también en deportes,  que pueden ser usados tanto por una comunidad sorda como oyente. Por lo tanto se debe desmitificar que el uso de las manos o de señas es exclusivo de las personas sordas.

Al hablar del estudio de la Lengua de Señas se debe abordar desde la historia de la educación de los sordos, pues se encontró que los primeros maestros de niños sordos les enseñaron señas para poder comunicarse. Entre ellos se encuentra Pedro Ponce de León, Juan Pablo Bonet que recupera la experiencia de Pedro Ponce y sistematiza el uso de señas a través de su obra "Reducción de las Letras y Arte para Enseñar hHblar a los Sordomudos". Por otro lado, Lorenzo Ignacio Gervasio Panduro reconoció que la lengua de señas española antigua, tenía dos categorías gramaticales: verbos y sustantivos, además de tener reglas de organización para comunicar ideas.

Otro método que aparece en la educación del sordo es el oralismo, el cual tiene como objetivo que la persona sorda se comunicara de manera oral y deje de utilizar las señas. Dicho método fue dominante en las instituciones dedicadas a la educación del sordo del siglo XX hasta los 60’s. A pesar de esta situación, persistió el uso de esta lengua entre los miembros de la comunidad sorda.

En los 60’s se produce un cambio importante en la educación del sordo, resurge el uso de la lengua de señas como una lengua natural de los sordos y necesario para mejorar su educación, ya que los maestros se dieron cuenta que con el oralismo no aprendían la lengua dominante ni la LS. Esta situación se vio impulsada por el cambio de visión paradigmática hacia las personas con discapacidad, de una visión médica-rehabilitatoria a un modelo social, cuya filosofía indica que la persona se ve limitada por las barreras de su entorno y no por su discapacidad.

Como evidencia de que la Lengua de Señas es una lengua natural se encuentra la configuración arbitraria que le da cada cultura o grupo de sordos a una seña, por ejemplo, en la seña árbol, las personas chinas le dan más importancia a las raíces, por lo tanto destaca el movimiento de los dedos que simbolizan éstas.

En México se creó la primera escuela para sordomudos en 1867, detonó el origen de la Lengua de Señas Mexicana a través del intercambio entre las señas de los profesores y las usadas por los estudiantes.

Se han realizado diversos estudios sobre la Lengua de Señas Mexicana, por ejemplo, Donna Jackson Maldonado se centró en la importancia de la adquisición de la Lengua de señas como primera lengua de los niños sordos; Tomas Smith-Stark se enfocó en comprender la estructura de la LSM, su genealogía y su transcripción; otro estudioso de esta lengua es el Dr. Boris Fridman Mintz, quien hace una análisis, detallado, de cómo las personas sordas gestualizan y realizan movimientos corporales al expresar verbos.

En la lingüística de la Lengua de Señas se pueden identificar los siguientes elementos: simultánea, nos indica que la configuración de la mano, el movimiento y ubicación de una seña se realiza al mismo tiempo, por ejemplo, la seña de árbol; secuencial, cuando la seña empieza en un lugar y termina en otro, ejemplo, la seña de sordo empieza en el oído y termina en la boca; espacial, las señas se pueden ubicar en cualquier espacio comprendido entre la cabeza y la cintura; temporal, indican el momento en que ocurrirá alguna acción o evento, por ejemplo, todos los lunes juego fútbol.

La comunidad sorda ha tenido un papel importante en el estudio de la Lengua de Señas a través de la elaboración de vocabularios, en la recuperación de la historia de la comunidad y también en la realización de un análisis de la LSM. No olvidemos que son ellos los que pueden generar nuevas señas de su lengua.